Guillermo Báez

OFF THE RECORD

¿Nos confiesas tu edad? 43 años.

¿Dónde naciste?: Lliria (Valencia).

Una música imprescindible: Réquiem de Mozart.

Intérprete favorito: Mstislav Rostropóvich.

Compositor predilecto: Wagner.

Tu último libro: … Faules de guerra de mi amigo Carles Subiela.

Una película que ver: Cualquiera que me haga pasar un buen rato y sobre todo que tenga una buena banda sonora.

Un hobby para desconectar: Me encanta cocinar y si es para amigos mejor aún.

Una comida sin la que no puedes pasar: Arroz (en cualquiera de sus variedades).

¿Y una bebida?: Cerveza muy fría.

Un sitio para vivir: Donde esté mi familia.

Un deseo: Salud para todo el mundo.

CUESTIONARIO

¿A qué edad empezaste a estudiar el trombón?

A los 14 años.

¿Quiénes han sido tus profesores?

Miguel Llopis, Rafael Tortajada, Joaquín Vidal, Enrique Crespo, Steven Mead, Robert Child y muchísimos músicos con los que tengo la suerte de poder aprender tocando a su lado, a todos ellos, gracias.

¿Dónde has estudiado? Nombra los centros por los que hayas pasado a lo largo de tu itinerario formativo: escuelas, conservatorios, academias…

Ateneo Musical y de Enseñanza Banda Primitiva de Lliria y Conservatorio Superior de Música de Valencia.

¿Cuál es tu metodología de trabajo? (Durante todo el proceso: desde el calentamiento hasta el final del estudio)

Para mi es primordial comenzar a tocar de manera muy relajada y con grandes respiraciones, seguidamente ejercicios de notas largas en distintas dinámicas, intervalos, flexibilidad, escalas, articulaciones, etc… Una vez puesto todos estos mecanismos técnicos en su sitio sería hora de abordar estudios, conciertos o repertorio que se esté trabajando.

Desde la primera nota hasta la última lo principal es que se toque con musicalidad.

¿Cuál es el aspecto más importante, en tu opinión, de la técnica interpretativa trombonística?

Trabajar desde la libertad del aire, esto nos va a llevar a conseguir un sonido propio y de calidad que para mí es la seña de identidad y carta de presentación de cada uno. Creo que es fundamental tocar lo más relajado posible, cuando esto se consigue todo es mucho más fácil.

¿Con qué escuela del trombón te identificas más?

En un mundo tan global como el actual creo que ese concepto que había antes de identificarse con una escuela está un poco desfasado, pero si hay que elegir una me quedaría con la americana. En España hemos sabido captar las buenas ideas que han ofrecido escuelas como la francesa, americana o alemana. Aconsejaría a los alumnos que cada cual desarrolle su propia personalidad con el instrumento.

¿Cuál es el nivel de los intérpretes de trombón españoles?

Sin duda muy alto. Desde hace varios años se ha dado un salto cualitativo muy importante en el panorama internacional, siendo reconocido en todo el mundo.

¿Cómo valoras la formación que reciben los trombonistas españoles, en general?

En general la valoración como instrumentista creo que es muy buena, aunque el sistema educativo creo que es mejorable.

¿Qué opinas del nivel pedagógico de los profesores de trombón en España?

En líneas generales el nivel pedagógico del profesorado es muy bueno, se ha avanzado mucho en la enseñanza del trombón en España, donde muchos profesores se han preocupado de formarse ellos mismos para después poder formar correctamente a sus alumnos.

Hay otros que no lo han hecho pero no pasa nada, seguro que tampoco leerán esta entrevista.

¿Qué valoras menos de la forma de enseñar el trombón en nuestro país?

Aunque esta tendencia parece que está cambiando, creo que se le da mucha importancia al trabajo como solista y se deja de lado el trabajo en sección.

Por otra parte, ya va siendo hora de que haya una especialidad de trombón bajo en los Conservatorios al igual que hay en otros países de nuestro entorno.

¿Qué valoras más de la forma de enseñar el trombón en nuestro país?

La alta calidad técnica que se transmite a los alumnos. Por suerte hoy hay profesores comprometidos con la enseñanza y se puede elegir el que más se adapte a las necesidades y exigencias de cada alumno.

¿Qué aspectos deberíamos copiar de los centros educativos de otros países?

Mas que copiar de otros países abogaría por una enseñanza más especializada en los distintos repertorios, trabajo en sección y orientación laboral.

¿Consideras que el trombón tiene suficiente presencia en la cultura musical española?

Creo que la música no tiene suficiente presencia en la cultura musical española. En esta tesitura es obvio que el trombón tampoco está lo suficientemente presente.

¿Qué crees que podría hacerse para aumentar dicha presencia?

Creo que son muy importantes los encuentros organizados por la ATE en las distintas ciudades, pero en la medida de lo posible estos encuentros deberían de salir más de los conservatorios y mostrarse más al público en general.

¿Tienes más ideas que puedan ayudar a difundir el trombón y su música?

Encargos de obras en distintos estilos y formatos y que las mismas puedan llegar a todo tipo de público a través de concursos, presentaciones y conciertos de estas obras pueden hacer que poco a poco se vaya llevando a más público a nuestros conciertos.

¿Cuál es el repertorio para trombón que más te gusta?

Me encanta la música donde el trombón demuestra su expresividad y gran sonido, desde el repertorio del siglo XVIII, Requiem de Mozart o La Creación de Haydn, al romántico francés del siglo XX pasando por la Salsa o el Jazz.

¿Cuál es tu obra favorita?

New Orleans de Eugene Bozza y Concierto para Trombón y Orquesta de Nino Rota

¿Cuál es la marca de trombón con la que tocas y por qué?

Desde hace 5 años soy artista de la firma Michael Rath. Sus trombones son de la más alta calidad, muy versátiles y con un excelente sonido, los cuales hacen mucho más fácil mi trabajo.

¿Cuáles son las iniciativas o actividades de la ATE que encuentras más interesantes?

Sin duda los encuentros Junior, en ellos están nuestros trombonistas del futuro, tenemos la obligación de hacerlos crecer de la mejor manera posible.

¿Alguna idea que nos ayude a mejorar la ATE?

Después de la exitosa organización del ITF 2015 en Valencia se ha de mantener ese nivel de exigencia. Que sea una Asociación abierta a todo el mundo, eso hará que siga creciendo. Creo que sería bueno negociar convenios con distintas entidades para conseguir ventajas para los socios de ATE.

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